La Conferencia de las Partes de la ONU sobre Cambio Climático (COP19) que inicia mañana en Varsovia desea acercar posiciones para un acuerdo en 2015 que permita disminuir las emisiones contaminantes, a lo que se oponen varios países, entre estos el anfitrión, Polonia, con un tipo de dinero fundamentado en el carbón.
Miles de delegados de 192 países y cientos de ONGs participarán en esta conversación en la capital polaca, que durante doce días analizará los efectos del giro climático y las fórmulas para disminuir las emisiones contaminantes.
Sobre la mesa un último análisis de Naciones Unidas que se realizó público últimamente, donde se asegura con una certeza del 95% que el hombre es “la causa dominante” del calentamiento global desde la década de 1950.
Este dossier asegura que el calentamiento global es algo “que se percibe claramente” tanto en la tierra como en la atmósfera y los océanos, algo que para Naciones Unidas urge a alcanzar un acuerdo para disminuir las emisiones más contaminantes.
La reciente Conferencia de las Partes de la ONU sobre giro climático, conmemorada en Doha (COP18), concluyó con una resolución para estirar el espacio de acuerdo del Protocolo de Kioto hasta 2020, aunque algunos de los países más contaminantes como EEUU, China, Rusia, Japón o Canadá no se sumaron.
En la cita de Varsovia es difícil aventurar si los etapas concurrentes serán aptos de alcanzar un acuerdo de mínimos sobre la disminución de emisiones, en tanto los grupos ecologistas y las ONGs solicitan objetivos más ambiciosos no solamente en seguida de 2020 sino así mismo antes.
Al mismo tiempo arrecian las reprobaciones contra Polonia, país que acoge una cumbre contra el giro climático Pese de ser una de las economías europeas más dependientes del carbón y la quinta en cuanto a la emisión de CO2, más que países como por dechado España, con mayor población y una economía más trasendente.
Polonia teme el pago de pasar de un tipo de producción fundamentado en el carbón, un combustible de dinero y que se ubica en las minas polacas, al de energías limpias, más caras y poco rentables.
Varios grupos ecologistas así mismo han reprochado a algunos de los patrocinadores de la COP19 por su “historial” contaminante, fundamentalmente a empresas como el grupo LOTOS (compañía de petróleo polaca), PGE (que opera la planta de lignito de Belchatów, la productora de electricidad que emite más CO2 de Europa) o ArcelorMittal (la mayor siderúrgica del planeta).