Manifestaciones de violencia policial contra ciudadanos afrodescendientes de los EEUU constituye una violación de sus derechos humanos

La Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU) ha expresado su profunda consternación sobre el incremento y reiteradas manifestaciones de violencia policial excesiva contra ciudadanos afrodescendientes de los EEUU, en franca violación de su derecho a la vida y de otros derechos humanos fundamentales, que han tenido lugar principalmente desde julio de 2014 en diferentes ciudades de los EEUU, con un saldo, hasta el momento, de 10 fallecidos sin que se hayan tomado medidas efectivas para detener la impunidad de los perpetradores, incluida la celebración de procesos judiciales.

 

Estos acontecimientos en los EEUU apuntan al resurgimiento de la tensión racial y  evocan las demandas del  Movimiento por los Derechos Civiles, que tuvo lugar en ese país durante la segunda mitad de los años 50 y casi toda la década de los años 60, que continúa manifestándose de muchas formas hasta nuestros días y demuestran que la población afrodescendientes continua siendo relegada en el disfrute pleno de todos sus derechos y carecen de las garantías institucionales mínimas. Las estadísticas nacionales sobre los niveles educacionales e indicadores de salud son muestra fehaciente de la situación de desventaja que tiene los ciudadanos afrodescendientes y latinos, entre otras minorías con relación al ciudadano de origen anglosajón.

 

A pesar de esta realidad de discriminación y exclusión que subsiste en los EEUU, sus sucesivos gobiernos han pretendido erigirse como modelo de nación en el respeto a los derechos humanos y enjuiciadores de las realidades de otros países en el mundo utilizando la consideración de este tema en diferentes foros internacionales como elemento de presión y singularización selectiva con fines políticos contra ciertos países, que dieron al traste con la otrora Comisión de los Derechos Humanos de las NNUU y desvían demagógicamente el análisis de esta problemática en su propio país.

 

La ACNU insta a la sociedad civil norteamericana y a su gobierno a considerar en un dialogo nacional las cuestiones relacionadas con la discriminación racial para poner fin a las causas raigales de este fenómeno que es un bochorno para el mundo.

 

En este contexto, la ACNU llama al gobierno de los Estados Unidos a adoptar medidas legislativas suficientes para poner fin al racismo, a la discriminación racial, xenofobia o intolerancia de cualquier forma y a que considere la ratificación de los siguientes tratados internacionales: Convención sobre los Derechos del Niño, Convención de la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, Convención sobre los Derechos de los Trabajadores Migrantes y sus Familiares, así como otros convenios de la Organización Internacional del Trabajo sobre el trabajo forzoso, la edad mínima para el acceso al empleo, los derechos de los trabajadores domésticos y la discriminación en empleo y ocupación. Instamos también al gobierno de los EEUU a abstenerse de políticas discriminatorias contra terceros, a la imposición de medidas coercitivas unilaterales contra Estados soberanos, a abordar el tema de los derechos humanos autocríticamente y en un espíritu de cooperación.