La sociedad cubana apuesta por un nuevo paradigma, por el cual seguimos soñando y luchando

La Habana.- Entre representantes de su membresía, asociados, colaboradores y miembros del cuerpo diplomático acreditado en nuestro país, la Asociación Cubana de Naciones Unidas (ACNU) celebró su Aniversario 67 de fundada, en esta capital, organización que, como bien expresara su directora doctora Soraya Álvarez, “continúa el trabajo de sus predecesores desde su creación en 1947, trasladando a ella el espíritu y aspiraciones de la sociedad civil cubana, de sus intelectuales revolucionarios y académicos quienes, desde el primer momento de crearse la Organización de Naciones Unidas, abrazaron los ideales, propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas”.
Durante una breve intervención la Diplomática cubana destacó que once años después de su fundación y, con el triunfo de la Revolución cubana, la ACNU se vio fortalecida a partir de su renovación, en la que tuvo papel fundamental  nuestra Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y su líder Lázaro Peña.
Recalcó que dicha organización continúa cumpliendo sus objetivos fundacionales, en la promoción y conocimiento en nuestra sociedad, de la Carta de las Naciones Unidas y en la defensa del Derecho Internacional dando a conocer al mundo la política exterior de la Revolución cubana.
Rememoró seguidamente que “desde su creación, la ACNU se ha vinculado a temas muy relevantes. Antes de 1959 en la ofensiva librada contra la ley de la cuota azucarera, sucesivamente y desde hace más de cincuenta años en su denuncia contra el criminal bloqueo económico y comercial impuesto por Estados Unidos contra Cuba, su condena por la inclusión de nuestro país en la lista de naciones co-patrocinadoras del terrorismo en el mundo, su denuncia contra la ilegal ocupación de una base militar norteamericana en el territorio cubano de Guantánamo, contra la permanencia desde hace más de quince años en cárceles del Imperio de cinco luchadores antiterroristas cubanos…Todos ellos reclamos permanentes de nuestra Asociación hasta nuestros días”.
Con el objetivo de continuar cumpliendo lo expresado en la Carta de Naciones Unidas, la doctora Álvarez subrayó que la ACNU continúa y continuará exigiendo “la paz mundial y la eliminación de los obstáculos que la impiden, pues trabajamos por la justicia y la equidad, el desarme, la promoción del desarrollo sostenible, pilares fundamentales de nuestras actividades en el desarrollo de nuestros vínculos internacionales”.
Significó asimismo que, en estos últimos años, la sociedad civil cubana en general y las naciones del Sur se han centrado en la necesidad de modificar el paradigma de desarrollo predominante y de crear un nuevo marco global al reconocer la necesidad de una nueva agenda ante la creciente inseguridad financiera, climática, alimentaria, entre otros acuciantes y graves problemas que sacuden al mundo en la actualidad y que perviven por la continuación de la pobreza a escala universal, frenan el progreso, el desarrollo sostenible y, en definitiva, la paz mundial.
“La sociedad cubana, dijo, apuesta por un nuevo paradigma, por el cual seguimos soñando y luchando”.
Finalmente agradeció y destacó el interés y cooperación recíprocos que existen entre la ACNU y el grupo de agencias del sistema de Naciones Unidas acreditadas en nuestro país; “de la propia Cancillería cubana, que nos estimula y acompaña en este proceso de consultas y de forja de consensos en nuestra sociedad respecto al cumplimiento de nuestra agenda 2015. Ello nos ha permitido, junto a nuestro pueblo, la implementación de los lineamientos de una nueva política económica y social del Partido y la Revolución cubana con vistas a la actualización de nuestro modelo económico y social”, y a la vez en la prosecución de una tradición histórica que parte de la actitud de aquellos intelectuales fundadores quienes apoyaron y acompañaron la labor de la ACNU desde su creación.
Por  Astrid Barnet