La viceministra de Educación de Cuba, Dania López, destacó el compromiso del Estado cubano con la agenda educativa 2030 en evento ministerial “Un año de COVID: Priorizar la recuperación de la educación para evitar una catástrofe generacional", convocado por la UNESCO en español .
Durante su intervención compartió algunas de las alternativas adoptadas por el Ministerio de Educación para garantizar la continuidad del aprendizaje y la formación integral de los educandos, así como la preparación científica -metodológica de los docentes y directivos durante el enfrentamiento a la pandemia de la Covid 19.
Dania López expresó que para dar continuidad al proceso educativo se implementó un sistema de acciones para pasar a actividades docentes televisivas, con el objetivo de proteger la salud de los educandos y trabajadores del sector.
Afirmó que los círculos infantiles continuaron funcionando y se garantizó la atención y orientación a los niños, adolescentes y jóvenes que viven en zonas y comunidades de difícil acceso, precisó.
La Viceministra también hizo referencia a la preparación para la reapertura de las escuelas y subrayó que fue diseñada una estrategia a nivel nacional para las actividades organizativas, didácticas- metodológicas, de capacitación a directivos, docentes, familias y actores de la comunidad. Destacó que el cierre del curso 2019-2020 transcurrió sin trasmisión de COVID-19 en las escuelas.
La vice titular de Educación cubana reconoció que los retos son enormes y que se han aprovechado los aprendizajes obtenidos para seguir avanzando desde el currículo en la preparación de los docentes para enfrentar situaciones como esta, fomentar la producción de medios y recursos para la transformación digital del proceso de enseñanza aprendizaje y compartir experiencias, lecciones aprendidas, investigaciones en el área de la educación, las tecnologías educativas, la salud escolar y para el manejo de desastres, incluyendo los epidemiológicos.
El evento ministerial se incluye entre las acciones de la UNESCO para facilitar el diálogo sobre políticas y el intercambio de conocimientos para contribuir a la respuesta educativa a la pandemia de la Covid-19 y tiene como objetivo hacer un balance de las lecciones aprendidas, los mayores riesgos a los que se enfrenta la educación en la actualidad y las estrategias para que ningún alumno se quede atrás.