Intervención de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas, en la 21 sesión del Grupo de Trabajo Intergubernamental sobre el Derecho al Desarrollo. Ginebra 17-21 de mayo del 2021
Sr. Presidente:
La Asociación Cubana de las Naciones Unidas le da la bienvenida al Presidente del Grupo y al Mecanismo de Expertos, así como a los estudios temáticos que están en curso y la realización de esta reunión.
La ACNU desea expresar que el derecho al desarrollo es un derecho universal e inalienable, y es además un derecho colectivo que todos, sin discriminación, debemos disfrutar, y en conformidad debería promoverse y respetarse.
Las grandes diferencias entre naciones ricas y pobres, constituyen todavía uno de los principales obstáculos que atentan contra la realización del derecho al desarrollo. Es necesaria la distribución equitativa de la riqueza y urge el establecimiento de un nuevo orden económico mundial.
La diferencia entre mayor o menor desarrollo desafortunadamente ha marcado la diferencia en cuanto a las posibilidades de los sistemas de salud de nuestros países para el enfrentamiento a la pandemia de COVID.19 y el acceso a equipamiento médico, insumos e incluso las vacunas para la inmunización de la población. Los ricos y desarrollados llegan, los pobres esperan.
Sr. Presidente:
La ACNU y las más de 100 organizaciones de la sociedad civil cubana que la integran, apoyamos los trabajos para la redacción de un instrumento internacional vinculante sobre el Derecho al Desarrollo. Es nuestro interés que en la sección preambular de dicho proyecto de documento quede recogido como un serio obstáculo la aplicación de medidas coercitivas unilaterales
En nuestra realidad como cubanas y cubanos que vivimos y padecemos por más de 60 años la aplicación de un cruel bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el gobierno de los Estados Unidos de América, el cual constituye el principal obstáculo a la realización del derecho al desarrollo del pueblo cubano y nos impide avanzar con mayor celeridad en la implementación de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Esta política genocida, condenada y rechazada por la comunidad internacional, constituye además una flagrante violación de nuestros más elementales derechos humanos.
La codificación del disfrute pleno de este derecho beneficiaría a millones de personas en el mundo a los cuales se le niega hacer realizados sus sueños de vivir en un mundo mejor. Invitamos a las representaciones de países desarrollados a mostrar voluntad política y sumarse de manera entusiasta a los trabajos, que se abstengan de negar el derecho colectivo al desarrollo, obstaculizar el avance de su implementación y su reconocimiento jurídico en los organismos internacionales.
La Asociación Cubana de las Naciones Unidas ratifica su compromiso con las labores del Grupo de Trabajo y su disposición a intercambiar de manera constructiva, a fin de obtener un resultado positivo y avances concretos.
Muchas gracias