La Asociación Cubana de las Naciones Unidas (ACNU), organización de la sociedad civil cubana con Status Consultivo especial ante el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas y miembro de la Conferencia de las Naciones Unidas para las Organizaciones No Gubernamentales, aprovecha la ocasión de celebrarse el Día Mundial del Refugiado para expresar, en representación de las 105 organizaciones asociadas a ella, su preocupación por el aumento del número de refugiados a nivel mundial, principalmente como resultado de los conflictos bélicos, la violencia generalizada, las violaciones de los Derechos Humanos, la crisis económica y el cambio climático.
Si bien considera que la temática de los refugiados debe ser profunda y sistemáticamente afrontada por todos los países y la comunidad internacional, sostiene que quienes fomentan o estimulan los conflictos armados internacionales deben ser los que asuman las mayores cargas y responsabilidades en materia de refugiados.
En este sentido, reafirma la validez de la cooperación internacional, especialmente entre los países de origen o nacionalidad, de tránsito y de destino; como vía fundamental para enfrentar ese problema global.
La ACNU saluda a la Conferencia Mundial de los Pueblos “Por un mundo sin muros hacia la ciudadanía universal” que se desarrolla en Tiquipaya/Cochabamba, Bolivia, la cual responde a los esfuerzos de los pueblos por promover alternativas y propuestas que contribuyan a construir puentes de integración y a trabajar en un plan de acción de los pueblos para alcanzar la ciudadanía universal.
Respalda la Declaración de Nueva York sobre refugiados y migrantes, adoptada por consenso el 19 de septiembre de 2016 donde se reafirma el compromiso de la comunidad internacional con los derechos, libertades fundamentales y la protección de esas personas. Igualmente, trabaja en la preparación del Pacto Global para una migración segura, ordenada y regular que se adoptará en septiembre de 2018.
No obstante, entiende que las causas estructurales que provocan el aumento de los refugiados, particularmente las guerras y políticas desestabilizadoras hacia gobiernos progresistas, como la que se orquesta en contra de la hermana República Bolivariana de Venezuela, el terrorismo y la expoliación de recursos naturales; las diferencias entre las naciones desarrolladas y en desarrollo, así como la plena realización del derecho al desarrollo de los países pobres deben constituir prioridades en el análisis, enfrentamiento y búsqueda de soluciones a ese flagelo mundial.
Ratifica que los grandes desplazamientos de refugiados requieren de un apoyo amplio en materia de políticas, asistencia y protección, en consonancia con las obligaciones de los Estados en virtud del derecho internacional.
La ACNU subraya que los refugiados necesitan vivir su vida en condiciones de seguridad y dignidad, por lo que condena los actos y manifestaciones de discriminación, racismo, xenofobia, persecución, intolerancia y cualquier otra lesiva a la integridad humana contra ellos y los estereotipos que a menudo se les asignan.
La Habana, 20 de junio de 2017