“Soy la hija más afortunada del mundo porque tengo al padre más maravilloso, amoroso, sensible y solidario, el que me enseñó a resistir y luchar”

“Mi Papá me expresó su agradecimiento y muy enfáticamente quería que lo manifestara públicamente, a todo el pueblo puertorriqueño, al pueblo latinoamericano y muy especialmente a Cuba, Venezuela y Nicaragua”. Expresiones de Clarisa López Ramos, hija del prisionero político puertorriqueño Oscar López Rivera, durante la conferencia de prensa relacionada a la conmutación de sentencia otorgada por el presidente estadounidense Barack Obama, al puertorriqueño. Oscar será excarcelado no más tarde del 17 de mayo de 2017.

“Las pasadas horas han sido las más felices de mi vida”, manifestó. “Soy la hija más afortunada del mundo porque tengo al padre más maravilloso, amoroso, sensible y solidario, el que me enseñó a resistir y luchar”, expresaba Clarisa.

En la primera llamada telefónica luego de conocerse la conmutación de sentencia;  “Lo primero que me pregunta es cómo estoy, le dije que estoy feliz. Y me dice que siempre estaba esperando que si ocurría algo, que fuera en la víspera de mi cumpleaños o en mi cumpleaños porque sería el mejor regalo de cumpleaños. Comencé a llorar”, relató. En el día de hoy ella cumple 46 años. “Celebro el mejor regalo de cumpleaños, mi querido viejo por fin podrá regresar a casa”, continuaba diciendo Clarisa.

Oscar, que el pasado 6  de enero cumplió 74 años, fue encarcelado en 1981, acusado por conspiración sediciosa para derrocar al Gobierno de Estados Unidos. La orden de liberación del prisionero 87651 – 024, se dio en la tarde del 17 de enero de 2017, junto a otras 208 conmutaciones de sentencias y 64 indultos anunciados por Obama.

En la actualidad, Oscar se encuentra en la prisión de Terre Haute, en el estado de Indiana, E.U.A. En dicha prisión compartió celda por varios años el Héroe Cubano Fernando González Llort.

El próximo sábado ella visitará a su padre en la prisión, eso la llena de mucha emoción y se refleja en las lágrimas que surcan su alegre rostro.  “Sé que pronto mi querido viejo saldrá de prisión y compartiremos una vida juntos”. Ella está muy deseosa de poder prepararle a su padre una taza de café… compartir en la sala de su casa, sin la supervisión de carceleros, una conversación, la lectura de libros pendiente… caminar por los bosques, las playas… disfrutar del vuelo de las mariposas Monarcas.  “Vamos a estar juntos y aprovecharemos esta oportunidad de construir nuestro futuro juntos”, añadió.

En la conferencia de prensa, se encontraba la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz y Luis Gutiérrez, congresista de la Cámara de Representante de E.U.A. y representantes de diversas organizaciones sindicales, cívicas, políticas y religiosas.

“Estoy muy feliz y abrumado de la emoción… Esta lucha se extendió a todo el pueblo de Puerto Rico. Oscar López Rivera es un símbolo internacional del puertorriqueñismo, de la gente que tiene principios y dignidad”, indicó el congresista Gutiérrez, para quien López Rivera y su hermano José son amigos.

Clarisa informó que todavía es muy prematuro hablar de la organización del recibimiento de su padre. Pero es casi seguro que cuando salga de la prisión se trasladará a la ciudad de Chicago, para agradecer y compartir con amigos y familiares. Luego regresará a Puerto Rico donde se establecerá. Estará viviendo en la ciudad de San Juan juntos a su hija. Oscar, ya tiene una oferta de trabajo para laborar en comunidades marginales. Algo que comentó Clarisa es que su padre le indicó que más nunca utilizará ropa de color kaki, como el uniforme de prisionero. También dijo Clarisa que desea que llegue el momento de la excarcelación para poder abrazarse con su padre prolongadamente, algo que se ha visto limitada por los últimos 35 años