A 30 años de que retornaran nuestros últimos internacionalistas de Angola, más me convenzo de que, además de militar, la victoria sobre Sudáfrica y sus aliados fue un triunfo profundamente humano
Por: Pastor Batista Valdés
A 30 años de que retornaran nuestros últimos internacionalistas de Angola, más me convenzo de que, además de militar, la victoria sobre Sudáfrica y sus aliados fue un triunfo profundamente humano.